El cuento de nunca acabar

Sólo sabe decir ¡no, es no! Estoy empezando a pensar seriamente que esto que está sucediendo ante nuestras narices, sin que nadie reaccione de manera eficaz, nos lo hemos estado ganando a pulso durante mucho tiempo. Lo que estamos viviendo debiera resultarnos inadmisible, pero esta sociedad se queja, se indigna…con la boca chica y los líderes políticos siguen burlándose de todos nosotros, con una tranquilidad que sólo puede significar que están convencidos que no habrá reacción, cuentan con que somos una punta de mansos que no merecemos el menor respeto. Si digo verdad soy de mecha corta, en esta vida topo a veces con problemas, que dejan a las claras que tengo menos correa que un reloj de pared, pero en lo de la política, dejando de lado la “mala milk” que viene de mi natura, acostumbro a tomarme las cosas con calma, porque me consta que los políticos en general merecen muy poco respeto. Consiguen preocuparme en muchas ocasiones, pero no logran sacarme de mis casillas. Ho...