¡Cómo si los hubiera parido!

Ayer les explicaba lo que significaba para Sánchez la frase esa de “no habrá otras elecciones” y las opiniones al respecto mis lectores zurdos, que a pesar de todo, me hacen el favor de su lectura no era demasiado entusiastas. Sus comentarios estaban entre imaginación desatada y mala leche congénita. Por mucho que moleste a algunos para analizar las intenciones de D. Pedro Sánchez no hace falta tener una bola de cristal. Si vamos a ser sinceros - gastar algo de sinceridad no perjudica, por el contrario, dicen que ayuda a mantener el cutis fresco y joven - a D. Pedro se le ve venir de lejos, porque si se trata del PP o de Mariano Rajoy, se le pone una cara que delata unas intenciones que para sí quisieran los toros bravos de la ganadería de Miura. No lo puede remediar, se le hincha una vena en la garganta de tal manera que cualquier día le da un yuyu en una rueda de prensa. Hablando de Pedro Sánchez, hoy leía lo que contaban los medios sobre la desesperación de much...