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Mostrando las entradas etiquetadas como gasolinera

Al final va a ser que, son todos de Acción Católica

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Pepiño, ahora un santo laico A pesar de que uno tiene ya una edad considerable y de la presunta experiencia que eso me pueda aportar, no puedo por menos que reconocer que me han dejado boquiabierto las explicaciones que ha dado Pepiño Blanco sobre el asunto de Dorribo, lo de la cita clandestina en la gasolinera ¿qué clandestina es exagerado?, pues vale la cita discreta en la gasolinera y los 400.000 euros que dice su colega que se le ha dado, al objeto de que pasara al terreno de los hechos el pensamiento que Blanco parece le trasladó: “Si tú te portas bien con nosotros, nosotros nos portaremos bien contigo”. El asunto pinta mal; Dorribo no le ha contado sus cositas a un periodista o a un amigo deslenguado que se haya ido de la mui, el amiguete del ministro se lo ha contado a una juez, con asistencia letrada y ha ratificado su declaración y la ha ampliado, a lo largo de otra deposición en la que durante horas ha hablado y aportado documentación, que es de suponer, apo...

La campaña socialista, de mal en peor

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Rubalcaba y Blanco, dos hombres y un destino... Llevan una temporada el PSOE y su candidato, ya saben el de la triste figura, que parece mismamente que a   los   dos los hubiera mirado un tuerto. Conste que nada tengo contra los tuertos, me limito a utilizar un lugar común muy nuestro; pero habrá que reconocer que tienen un gafe encima que deberían hacérselo mirar. No hay nada que les cuaje, las propuestas de Rubalcaba se deshacen como los azucarillos en el agua, basta que proponga algo para que la realidad de las cosas o el propio gobierno socialista le obliguen a “matizar” – así se llama a una rectificación en alto politiqués – y si no lo hace él mismo, el servicio de prensa del PSOE se ocupa de hacerlo. Me decía una querida amiga, que no está alineada de ningún modo con el PP, por lo que no resulta sospechosa de partidismo, me decía, digo, que estaba cansada de escuchar hablar a Rubalcaba de sus “dudas razonables”. Decía Borges que “La duda es uno de lo...

A Pepiño se le acaba el tiempo y le crecen los enanos

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Resulta extremadamente curioso el empeño que tiene Pepiño Blanco en no querellarse con el empresario que anuncio y por lo visto denunció, que había engrasado la voluntad de Blanco y que la fiesta le había salido por un pico. Nada más y nada menos que 400.000 euros de sus entretelas le habría presuntamente costado ablandar la voluntad del ministro de Fomento, portavoz del gobierno y si no me engaño Secretario de Organización del PSOE. 400.000 del ala para que Blanco se “portara bien con Dorribo” y otra pasta gansa para uno del PP y otro del BNG, que lo que son las cosas dimitieron en cuanto se publicó la noticia; que hay que ver lo raro que resulta que en este país de nuestros pecados alguien dimita. Pues ya ven ustedes de los tres elementos denunciados por este Dorribo, dos se fueron a casita, protestando su inocencia, pero dimitieron para no perjudicar a sus respectivos partidos políticos; mientras Blanco hacía oídos sordos a la espinosa cuestión y se mantenía terne en to...

De Pepiño a D. José y de Blanco a Pepiño…

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Pepiño dice "no hay caso ni lo habrá"... …Pues sí, lo de pasar de Pepiño a D. José tuvo su aquel, una trayectoria difícil, dura, muchas humillaciones, muchas horas de trabajo, mucho sí jefe ¡qué bueno eres! y en cambio lo de volver a Pepiño raso es que ha sido en un visto y no visto. Una cita en una gasolinera y se acabó. Este chico es que no aprenderá nunca. Consiguió un ascenso meteórico en Madrid, ascenso que se le negaba en su tierra. Los del PSdeG-PSOE habían prohibido a Pepiño que hablara en público, porque en el partido había quien sostenía que cada vez que Blanco abría la boca, subía el pan. Vamos que perdían 3.000 votos cada vez que a Pepiño Blanco se le ocurría sacar la lengua a pasear. Tuvo que emigrar a Madrid y allí, para sorpresa y desagrado de los muchos “amigos” que había dejado en su tierra natal, comenzó a lucir de manera escandalosa. Que fue arrimarse a un tal Zapatero, un tipo medio raro de León y en un pis pas, el leonés se había c...