El puente de Alcántara: De lo mejor que se ha escrito en novela histórica



Sabía que tarde o temprano llegaría el día en el que comentaría en estas páginas “El puente de Alcántara” una magnífica novela histórica que debemos a la pluma de Frank Baer, un prestigioso hispanista alemán. No recordaba cuando fue que comenté esta obra en Solo libros, el programa de televisión en el que trataba sobre los libros, pero estaba seguro de que a lo largo de los diez años durante los que presenté el programa forzosamente lo habría comentado y por lo tanto sabía que lo comentaría.

Si digo verdad este relato es una de las novelas que más me han gustado a lo largo de mi vida como lector. Cierto es que soy muy aficionado a la novela negra, pero la novela histórica me ha gustado también muchísimo desde mi infancia y este libro que hoy comento para ustedes me impresionó de manera muy importante desde el primer momento que acometí su lectura.

Frank Baer como ya he dicho es un hispanista alemán que nació en Dresde en el año 1938, nuestro autor se educó en Würzburg, trabajó como periodista y filólogo, colaboró en su momento con la televisión de su país y alguna de sus obras se ha llevado al cine. “El puente de Alcántara” fue su primera novela de tema histórico, una trabajadísima obra a la que dedicó nada más y nada menos que cinco años de su vida; una novela compleja y completa tanto en su concepción como en el trabajo de creación de la parte del relato que es ficción y de sus personajes, en la que vamos a disfrutar de la utilización de un lenguaje claro y muy adecuado a la época en la que transcurre.

La novela trata de la historia de la España medieval a mediados del año 1000, de hecho comienza el relato el día 30 de julio de 1063 y finalizará 23 años después el 8 de julio de 1086. El propio autor explicó cómo se documentó para acometer la escritura de “El puente de Alcántara”, se valió de un minucioso estudio que el arabista Salomo Dob Goitiein llevó a cabo y que publicó en cinco volúmenes con el título de “A Mediterranean Society” en los que describe con una riqueza de conocimiento digna de admiración la vida cotidiana y las circunstancias en las que vivieron los judíos de los siglos XI y XII en los países mediterráneos dominados por los árabes.

De un libro titulado “Libro de los milagros de Santa Fides” el autor obtuvo alguna de las historias que nos relata, creo que se puede decir sin ningún género de dudas que la historia que nos relata Frank Baer está muy próxima a la realidad de las distintas sociedades que convivían en el espacio geográfico que hoy ocupan Portugal y España, y esta proximidad a la realidad se debe en gran parte al minucioso trabajo de documentación llevado a cabo por el autor.

Este relato probablemente sea la mejor novela histórica que haya hecho referencia a la España de la baja Edad Media. Una época peligrosa para sus habitantes, sangrienta y miserable pero llena también de esplendor, una época en la que en el territorio que hoy conocemos como Península Ibérica convivían - quizás sea mejor decir que coincidían, porque lo de la convivencia resulta un poco mítico - tres culturas preponderantes, la musulmana, la judía y la cristiana. Una época en que las guerras entre musulmanes y cristianos y las de cristianos y musulmanes entre ellos mismos creaban un clima de peligro e incertidumbre difícil de superar. Una época difícil que constituirá el comienzo del fenómeno que conocemos como la Reconquista que unos siglos más tarde conseguirá la derrota total de los musulmanes y su posterior expulsión de España.

El autor crea un inmenso cuadro para poner ante nuestros ojos un auténtico retablo de personajes y sucesos, unos ficticios, otros rigurosamente históricos y ha utilizado como hilo conductor de su relato a los tres personajes más importantes de los centenares que conoceremos en las páginas de la novela. Tres individuos de 
distinta edad, religión y procedencia: Por un lado el poeta Ibn Ammar, musulmán y de hecho personaje histórico pues vivió en la realidad de la historia, por otra el médico judío Yunus inb al-A’awar perteneciente a la comunidad palestina de Sevilla y finalmente  Lope un muchacho cristiano, casi un niño todavía, al servicio de un pequeño noble que vive en Sabugal en territorio que hoy es Portugal. 

Junto a ellos la imaginación y el conocimiento de la historia de España del autor nos presentará a campesinos cristianos y musulmanes, comerciantes, frailes y obispos; nobles, hidalgos, guerreros, mercenarios, normandos, francos, árabes. Como ya he dicho antes un auténtico retablo de coprotagonistas que van a acompañar las aventuras de estos tres personajes fundamentales en la novela que son los que nos van a llevar a través de distintas vicisitudes individuales y colectivas a lo largo de la novela hasta que sus destinos se unan por mor del capricho del autor y será a través de sus aventuras como conoceremos la realidad de la vida de esa España en plena Edad Media.

Poco a poco la vida y el destino de cada uno de ellos los va a llevar a través de un sin fin de aventuras y a través de unos caminos que serán al principio paralelos, para después tornarse en convergentes, para por fin coincidir y seguidamente volver a separarse y volverse a encontrar arrastrados por su destino y el sino colectivo de aquella sociedad en perpetua ebullición y cambio que era la que vivía entonces en nuestro territorio.

La minuciosa narración de Frank Baer nos acercará a la intrahistoria de aquella España de entonces y ese minucioso conocimiento de aquella sociedad o sociedades nos permitirá conocer cómo vivían y se relacionaban los habitantes de aquella España convulsa que se estaba empezando a formar. A través del relato conoceremos las técnicas médicas, la manera de comer de aquellos hombres y mujeres, la tecnología aplicada a las armas y utensilios de la guerra, el sistema de transporte, etc. etc.

En este libro conviven con perfecta naturalidad cientos de personajes, unos históricos y otros de ficción tal y como ya he señalado, todos ellos al servicio de un relato, que no nos engañemos es una perfecta novela de aventuras. Amores, traiciones, veleidades políticas, actos generosos, amistad, avaricia todo ello mezclado sabiamente con la realidad histórica que permite a nuestro autor presentarnos un relato emocionante y que va a atrapar irremediablemente a los lectores desde las primeras páginas.

Una obra en la que asistiremos a la sorprendente aparición del Cid Campeador, que en la novela es un personaje secundario, pero que aparece muy lejos de la definición tradicional que tenemos de él. Rodrigo Díaz de Vivar es descrito como un mercenario al servicio del mejor postor, un hombre dedicado a la caza del botín, muy lejos del héroe caballeroso que nos ha presentado siempre la historiografía española. Tengo que decir que cuando leí esta novela allá por el año 1.994 me sorprendió esta descripción de la figura legendaria del Cid, y he de decir que me sorprendió porque la descripción que hace Frank Baer de él me recordó de inmediato una de las conversaciones que mantuve de niño con mi madre; que recuerdo perfectamente tenía una opinión sobre el Cid muy parecida a la de autor.

Una novela magnífica que recomiendo sin ningún tipo de duda. Si no la conocen, léanla y si ya lo han hecho no duden en releer la obra de Baer que soporta la relectura a la perfección. 

Hasta aquí hemos llegado, espero que si Dios quiere nos volvamos a encontrar por aquí el próximo martes. Cuídense mucho.

Un abrazo.

Como probablemente sepan ustedes he publicado una novela negra "Al madero no le gusta la ropa vieja" cuyo escenario es Fuerteventura y su capital, Puerto del Rosario. Sus protagonistas, dos guardiaciviles que investigarán un homicidio. Por si estuvieran interesados en adquirir un ejemplar aquí les dejo el enlace que les permitirá hacerlo. ¡Feliz lectura!

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