Toxo ¿un provocador o un imbécil?



"Diálogo" entre CC.OO y el 15 M

Puedo admitir que no tengo demasiada buena opinión sobre estos dos millonarios que ejercen de líderes en CC.OO. y UGT, en realidad tengo de ellos una opinión pésima. Me parecen dos individuos más preocupados en sacarle dinero al gobierno, es decir a nosotros, para vivir como vivían los sátrapas persas y mantener bien engrasadas las voluntades de los miles de “clientes” que mantienen en sus organizaciones, de manera que esas prebendas que pagamos los ciudadanos y que reparten tan generosamente entre sus amigos les garanticen la renovación de su sinecura, que en defender los derechos de los trabajadores.

Aunque lo que ayer protagonizó Toxo en su Ferrol natal, deja a estos dos sindicalistas de vía estrecha a la altura del betún. El de CC.OO había viajado a Galicia para participar en el Día de la Clase Obrera Gallega, una celebración que conmemora unos sucesos ocurridos en marzo de 1972, cuando en unas protestas de los trabajadores de los astilleros, la policía abrió fuego y mató a dos de los manifestantes resultando heridos 40 más. El de UGT no fue, porque se olía la tostada y como Cándido no ha nacido en El Ferrol como es el caso de Toxo, se hizo el sueco, que eso sí sabe hacerlo divinamente.

El Ayuntamiento de Ferrol celebra unos actos que incluyen una ofrenda floral de carácter institucional en memoria de las víctimas que, como ya he dicho, se produjeron en las manifestaciones del 72. Ayer en el transcurso de este acto, en el que participaba Toxo, se produjeron una serie de enfrentamientos entre gente de CC.OO, incluyendo a los “escoltas” del líder sindical y elementos del 15 M que pretendían participar en el acto y que desplegaron una pancarta en la que acusaban a Toxo y a Cándido de haber traicionado a la clase obrera. Hubo un “enfrentamiento verbal” aunque en las imágenes se puede ver que las cosas, aunque no llegaran a mayores, sí alcanzaron el estadio de los empellones y alguna que otra bofetada voló. Ya se sabe que el diálogo no es una virtud que ejerzan con suficiencia los “liberados” sindicales, eso lo saben todas las víctimas de lo que se ha dado en llamar eufemísticamente “piquetes informativos”.

Toxo ante lo sucedido hizo unas declaraciones que realmente claman al cielo. Calificó de lamentable la actitud del 15 M, por realizar una protesta en el mismo lugar y día en el que se llevaba a cabo un homenaje a dos trabajadores que perdieron su vida. Y continuó afirmando que “nosotros – CC.OO y UGT – podemos merecerlo, pero ellos no. Es un espectáculo que no venía a cuento. Supongo que será la falta de memoria”

Tenía mucha razón, hay que respetar los actos y los homenajes a gentes que perdieron su vida en actos producto de una violencia injustificada, pero resulta inadmisible que eso lo diga, solemne, dolido e indignado el mismo personaje que para hoy ha convocado una protesta laboral, el mismo día y en la misma ciudad en la que se pretendían llevar a cabo, como todos los años, las ceremonias en memoria de los 191 fallecidos y los  1.857 heridos víctimas de la violencia terrorista del 11 M.

Dice y no le falta razón, que la memoria de los dos obreros muertos durante las manifestaciones de 1972 no merecían la falta de respeto y el desorden organizado en el momento de proceder a su homenaje, pero resulta inadmisible que el mismo que reclama ese respeto para los dos muertos de Ferrol, ignore olímpicamente el que merecen las víctimas del atentado del 11 M, que él se ha encargado de sabotear con esa manifestación que ha convocado.

Me preguntaba en el título de este comentario si Toxo era un provocador o simplemente un imbécil, creo que con su conducta ha demostrado a las claras ser un oportunista, pero sobre todo, un miserable. Que un personaje de semejante catadura moral tenga el poder que tiene, nos dice claramente la gravedad de la crisis de valores que sufre nuestra sociedad.

Toxo divide a los muertos en dos categorías, los que le permiten su utilización mediática, es decir aquellos a cuyos actos conmemorativos puede acudir, hacer declaraciones, sacarse la “foto” y salir en la tele y los que no. No respeta a ninguno, a los que entiende que puede hacer “suyos” los utiliza, a los otros, como es el caso de los del 11 M los ignora y como hoy les falta brutalmente al respeto.

Pese a haber ignorado a las víctimas del 11 M, al dolor de las familias y de la gente de bien, no podrá evitar que los asesinados por el  terror islamista reciban hoy el homenaje de millones de españoles que los llevamos siempre en nuestro corazón y que desde luego recordaremos muy mucho lo que ayer dijo Toxo en Ferrol: Los dos fallecidos en 1972 merecían un respeto. Muy cierto, pero a la vista está — obras son amores y no buenas razones —  que los que murieron en Madrid el 11 de marzo de 2004 a manos terroristas no lo merecen, al menos desde el punto de vista de este miserable, que los desprecia al ignorarlos.

Ha llegado el momento de acabar con este tipo de sindicatos y de supuestos sindicalistas. Que rindan cuenta del dinero público que han manejado, que se investigue minuciosamente su gestión, sus cuentas y sus declaraciones a Hacienda y después que se vayan para casa o caminito de Jerez si ese es el caso, que pudiera ser que  sí.